La adenda al Plan de Recuperación es una actualización del documento aprobado en julio de 2021. El Gobierno presentó el documento a la Comisión Europea en el segundo semestre de 2022. el pasado 6 de junio se aprobó en Consejo de Ministros el documento final de la adenda de ampliación del Plan de Recuperación,Transformación y Resiliencia para su remisión a la Comisión Europea.
Esta actualización del documento incorpora tres importantes novedades:
- Asignar las transferencias adicionales que corresponden a España. Esto supone unas subvenciones adicionales de 7.700 millones de euros.
- Asignar los préstamos del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia. España podrá solicitar hasta un máximo de 84.000 millones de euros a la Comisión Europea.
- Asignar los fondos del Plan REPowerEU, cuyo objetivo es ahorrar energía, incrementar la producción de energía limpia y diversificar las fuentes de energía de Europa. En la distribución
provisional del fondo, se ha asignado a España, de manera provisional, 2.586 millones de euros adicionales.
La adenda dará continuidad a las reformas e inversiones del Plan de Recuperación, en línea con los objetivos estratégicos (transición ecológica, transformación digital, cohesión social y territorial e igualdad de género) con el foco en la autonomía estratégica a través de los proyectos estratégicos, conocidos como PERTE.
De acuerdo al Reglamento del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia de la Unión Europea (UE), para que España pueda acceder a los 7.700 millones de euros de las transferencias adicionales y a los 84.000 de préstamos, es necesario redactar un nuevo documento que incluya las reformas e inversiones a las que se van a destinar los nuevos fondos.
El Gobierno de España presentará una adenda al Plan de Recuperación, con la información adicional necesaria para distribuir la nueva financiación. La Comisión Europea evaluará la propuesta, que posteriormente debe ser ratificada por el Consejo Europeo. La evaluación de la adenda se realizará de acuerdo a los mismos criterios que el Plan original y deberá cumplir con ellos. Se trata de respetar el principio de no causar daño significativo al medio ambiente (DNSH) o el porcentaje de financiación dedicados a la transición verde (37%) y a la transformación digital (20%).
Las reformas y las inversiones darán continuidad a la estructura y objetivos estratégicos del actual Plan de Recuperación. Dado el actual contexto geopolítico, las inversiones deberán reforzar los PERTE en marcha y concentrar las inversiones en el refuerzo de la autonomía estratégica de España y Europa en cuanto a la seguridad energética, agroalimentaria, tecnológica y digital.